Kemon se toma muy en serio su responsabilidad corporativa y quieren convertirse en paradigma de marca sostenible desde el punto de vista medioambiental. Y nosotros como consumidores (y seres humanos) por supuesto lo agradecemos.
Así, trabajan para conseguir el mínimo impacto ambiental de sus procesos de producción, productos y servicios. ¿Cómo lo hacen?
Utilizan energía eléctrica proveniente de fuentes renovables como la solar.
Envases elaborados con GREEN PE, un material reciclable que no proviene de derivados del petróleo sino de la caña de azúcar, por lo que con esta medida se ayuda a reducir las emisiones de efecto invernadero, al no utilizar el petróleo, y además se utiliza una materia prima no escasa.
En este último año en Kemon han conseguido el certificado Love Nature. Éste lo obtienen empresas que fabrican sus productos sin ingredientes potencialmente perjudiciales para la salud del consumidor o medio ambiente.
La palabra “potencialmente” aquí es muy importante. Todas las marcas nos dirán que no usan ingredientes perjudiciales pero hay muchas líneas de investigación abiertas, y el hecho de que no usen ingredientes sobre los que existen dudas nos aporta tranquilidad.
Este certificado lo han obtenido gracias a que no utilizan en todo el ciclo de producción ingredientes de origen animal u obtenidos de organismo genéticamente modificados. Por supuesto ninguno de los productos es testado en animales.
Así, usando productos de esta gama, certificados con el ICEA VEGAN, te aseguras de que no estarán compuestos de ninguna sustancia química que pueda ser perjudicial para ti, pero tampoco para los animales o el medio ambiente.
Además, para poder conseguir este certificado es necesario utilizar recipientes que sean ecológicos.
La gama Actyva de Kemon ofrece multitud de productos, todos ellos centrados en el cuidado del cabello pero también del cuero cabelludo. Así, por ejemplo, tenemos el champú Equilibrio S para cabellos grasos, que ayuda a conseguir el equilibrio hidrolipídico de forma natural, sin que generemos dependencia hacia el producto ni se produzcan efectos rebote cuando dejemos de utilizarlo.
Porque está en nuestra responsabilidad como consumidores elegir las marcas que más estén apostando por el desarrollo sostenible.
Desde Más que Barba lo tenemos claro, todo lo que a nivel individual podamos hacer para frenar el cambio climático es importante, y una de las mejores herramientas que tenemos proviene de nuestra posición como consumidores.
Cuantas más personas elijamos productos que respeten el medio ambiente más se implicarán las marcas en ofertarlos y menos impacto negativo generaremos. Por ese motivo, felicitamos a Kemon por el esfuerzo realizado en este sentido.